- Acaba de publicarse un informe que insta a los empleadores del transporte a redoblar esfuerzos para afrontar los casos de violencia doméstica entre su personal —mayoritariamente masculino— y les ofrece recomendaciones sobre cómo lograrlo.
- El informe revela que el riesgo de accidentes, lesiones y muertes en las empresas aumenta cuando en el lugar de trabajo hay hombres perpetradores de violencia doméstica.
- El informe lo han elaborado la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte y el Centro de Investigación y Educación sobre la Violencia contra las Mujeres y la Infancia (CREVAWC) a partir de una investigación realizada con 116 trabajadores varones que fueron identificados por los centros de asesoramiento y la gerencia de las empresas como perpetradores de actos de violencia contra sus parejas.
Según el nuevo informe de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF), los lugares de trabajo y los empleadores deben hacer más para acabar con la violencia doméstica.
Los estudios sobre violencia doméstica suelen poner el foco en las repercusiones para las supervivientes, pero este informe, titulado Shifting the focus: impacts on workplaces when men engage in domestic violence (Desplazar el foco de atención: repercusiones en los lugares de trabajo de la violencia doméstica que perpetran los hombres), pone de manifiesto que la violencia que se da en el ámbito doméstico tiene un gran impacto en la seguridad y la productividad de los lugares de trabajo.
El informe, publicado con motivo del Día Internacional de las Naciones Unidas por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, detalla los efectos de la violencia doméstica en empresas de Maharastra (India) y formula ocho recomendaciones básicas para que los empleadores creen lugares de trabajo más seguros, entre las que destacan la realización de evaluaciones de riesgo de violencia doméstica y la puesta en marcha de procesos de denuncia y estructuras de formación.
“Para eliminar la violencia doméstica es preciso desplazar el foco de atención. Nuestra sociedad se ha centrado hasta ahora en las repercusiones que la violencia doméstica tiene para las mujeres, como si se tratara de un asunto que únicamente les incumbe a ellas”, explica el secretario general de la ITF, Stephen Cotton. “Pero esta idea parte de una base errónea. La violencia doméstica la perpetran sobre todo los hombres, y, si pretendemos en serio acabar con esta lacra, debemos trasladar el foco y centrarnos en que los hombres cambien de comportamiento, además de en las repercusiones negativas de sus abusos, en especial en los lugares de trabajo”.
“Desde el punto de vista laboral, este informe revela los efectos negativos de la violencia doméstica en el lugar de trabajo, desde el aumento del riesgo de accidentes, lesiones y muertes hasta la reducción de la productividad. Por ello, los empleadores tienen la responsabilidad de ponerse a la cabeza y tomar medidas como el establecimiento y el respaldo de políticas y procedimientos que propicien unos lugares de trabajo más seguros, así como de involucrar a los hombres en los debates sobre prevención e intervención en materia de violencia doméstica”, añade Cotton.
La violencia doméstica se pasa por alto demasiado a menudo, al considerarse un asunto privado, pero ahora podemos demostrar de forma concluyente que los empleadores tienen una importante responsabilidad legal —aparte de una gran responsabilidad moral— de hacer más para acabar con la violencia doméstica entre sus trabajadores.
“En la industria del transporte constituye un reto atraer y retener a las mujeres. El transporte es vital para la vida de las mujeres y, sin embargo, sigue siendo un sector dominado por hombres, donde hay una notoria falta de mujeres, que con demasiada frecuencia son víctimas de violencia y acoso”, afirma Diana Holland, presidenta del Comité de las Mujeres Trabajadoras del Transporte de la ITF.
“El COVID-19 ha exacerbado aún más la sigilosa pandemia de violencia contra las mujeres, de ahí la importancia de que todos los empleadores lean este informe y apliquen sus recomendaciones para garantizar la seguridad de todos los trabajadores y las trabajadoras del transporte. Además, el informe recuerda a los Gobiernos que ellos también pueden contribuir a la erradicación de la violencia y el acoso en el mundo del trabajo uniéndose a la creciente lista de países que ya han ratificado el Convenio 190 de la OIT”, concluye Holland.
Para más información, pónganse en contacto con Kim Rojas, especialista del programa de la ITF para la eliminación de la violencia contra las trabajadoras del transporte, llamando al +44 (0) 7887947158 o escribiendo a Rojas_Kim@itf.org.uk.
El informe completo puede consultarse aquí.
Post new comment